Los radares de remolque son dispositivos autónomos y móviles, lo que los hace altamente flexibles para su instalación en distintos puntos de la red viaria. Estos radares no necesitan estar conectados a la red eléctrica, ya que funcionan con energía autónoma. Utilizan tecnología láser para detectar la velocidad de los vehículos y pueden realizar un seguimiento dinámico de los mismos, determinando su velocidad incluso a lo largo de varios carriles.
Lo que diferencia a estos radares de los tradicionales es su capacidad para funcionar sin la necesidad de un agente de tráfico presente. Gracias a su conexión a internet, los radares de remolque pueden gestionar las infracciones en tiempo real, lo que permite a la DGT actuar de forma más rápida y eficaz.
Los radares de remolque ofrecen múltiples ventajas respecto a los radares tradicionales:
Con la incorporación de los radares de remolque, la DGT tiene como objetivo reforzar la seguridad vial y mejorar la eficacia del sistema de control de velocidad. Según el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, la implantación de estos dispositivos forma parte de una estrategia para modernizar la red de radares y garantizar una circulación segura en todas las carreteras de España.
A lo largo de 2025, la DGT tiene previsto instalar 122 nuevos puntos de control de velocidad en distintas localizaciones del país. Estos radares se sumarán a los 6 radares que ya operan en Andalucía (Almería, Málaga y Granada), los 10 radares en Galicia y Asturias, y los 8 radares en la Comunidad Valenciana. De esta forma, se busca cubrir diferentes zonas del país y hacer frente al exceso de velocidad, que sigue siendo un factor clave en el 21% de los siniestros mortales.
Desde que se implementaron los primeros radares hace 20 años, el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico ha disminuido un 75%. Sin embargo, el reto sigue siendo grande, y el exceso de velocidad sigue siendo uno de los principales causantes de accidentes. Por eso, la DGT continúa invirtiendo en nuevas tecnologías y sistemas de control para reducir aún más los riesgos en las carreteras.
La implementación de radares de remolque es solo una de las muchas medidas que está adoptando la DGT. La modernización de la red de radares, junto con la instalación de radares de tramo, que calculan la velocidad media de los vehículos en varios kilómetros, forma parte de una estrategia integral para garantizar que todos los conductores respeten los límites de velocidad y contribuyan a un entorno vial más seguro.
La incorporación de radares de remolque a la red de control de velocidad en España marca un hito en la modernización de las infraestructuras de tráfico y control de velocidad. Estos dispositivos, con su flexibilidad, autonomía y capacidad de gestionar infracciones de forma rápida y eficiente, representan una herramienta clave para mejorar la seguridad vial. Con la instalación de 122 nuevos puntos de radar en 2025, la DGT da un paso más en su estrategia para reducir la siniestralidad en las carreteras y garantizar una movilidad más segura para todos.
Opiniones de nuestros clientes
Recibe nuestras novedades